¿Qué tendencias marcarán la gestión empresarial?

Los negocios están evolucionando a la par de la tecnología. Para muchos, es prioritario innovar para mantenerse competitivos y no sucumbir ante la presión del entorno.

Las organizaciones deben tomar las ventajas competitivas a partir de la transformación digital. Es fundamental que se incluyan modificaciones en los modelos de gestión.  Asimismo, generar estrategias que motiven la creatividad de los empleados.

Blockchain

Uno de los importantes cambios que se avizoran es la consolidación del sistemas de bloques, que se viene gestando desde el 2017. Entre las premisas, se espera que muchas fintech utilicen este modelo a futuro para lograr una base común que permita la ejecución de transacciones comerciales.

Además, se pretende alcanzar un incremento de uso de un 19%. Como estructura económica, el mercado busca aumentar la base de datos de clientes en América Latina. También la reinvención de los exchanges para lograr una mejor oferta y demanda de productos y servicios.

Big Data e Inteligencia Artificial

Una de las expectativas, para este año, es el fortalecimiento de Big Data  y la Inteligencia Artificial. La unión de ambas tecnologías será clave para que las empresas tomen decisiones con base en informes en tiempo real  e indicadores de gestión.

La canalización y el análisis de datos son materiales útiles para diversas empresas y sectores.  De ellas, se obtienen datos del entorno y se logra que las maquinarias interactúen con los seres humanos.

Pagos invisibles

También se espera el aumento de la efectividad en los establecimientos, a través de mecanismos de escaneo de pagos que debiten el monto de la compra desde la cuenta del propietario.

Uno de los ejemplos más reales lo lleva a cabo Amazon Prime, donde la carga se hace directamente a la tarjeta de crédito, sin pasar por una caja registradora.

Los cobros sin fricción son parte de la experiencia inmersiva, por la capacidad que tienen de simplificar el proceso de compra del consumidor.

Por último, otras alternativas para efectuar el cobro a los usuarios sería la terciarización o las aplicaciones móviles. En este caso, la información de los clientes se almacenaría en la nube.